El coleccionismo, como cualquier otra afición, tenía unas reglas que debe seguir el verdadero coleccionista, y una jerarquía para distinguir entre las buenas y las malas colecciones. A algunas personas les gusta coleccionar objetos de un tema o tipo concreto, mientras que otras disfrutan con una mezcla ecléctica de sus propios intereses e inquietudes.
El coleccionismo como afición es una forma divertida y fácil de empezar para la mayoría de la gente. Todo el mundo puede disfrutar coleccionando diferentes objetos. Y no requiere ninguna habilidad o herramienta especial. Cuando se habla de coleccionar objetos por placer, mucha gente cree que se trata de antigüedades caras y valiosas. Las antigüedades son ciertamente cosas maravillosas, pero lo que más me fascina son las cosas que la mayoría de la gente nunca pensaría en coleccionar.
