Los cuadros tienen un fuerte valor simbólico. Cada técnica, ya sea realista o abstracta, transmite una emoción única y totalmente subjetiva, que hace que cada obra de arte sea especial a su manera.

Valoración de la pintura

Cada obra de arte es también un testigo de su tiempo, inseparable de un momento concreto de la historia, cuya esencia se ha transmitido hasta nuestros días.

Por ejemplo, los cuadros impresionistas del siglo XIX son muy valorados por sus técnicas de pintura al óleo. Estas obras de arte visionarias, si las pintan pintores de renombre, tienen un gran valor económico.

También hay obras de arte estéticas, cuya belleza puede generar un gran valor cuando se venden en subasta. Por esta razón, ciertos estilos son muy populares en las galerías de arte.

Los estilos de pintura modernos también son populares, especialmente en los interiores, y el Art Decó es uno de ellos. Cada cuadro contiene un trozo de historia que impresiona fuertemente a una pieza, y dependiendo de ciertos criterios, este fuerte valor simbólico puede a veces conducir a un alto precio en la subasta.

¿Quieres vender un cuadro?

Si posee una obra de arte rara, te recomendamos que la valore un experto para obtener el mejor precio posible.

¿Cómo valorar tus cuadros?

Los expertos en historia del arte verifican el origen y la autenticidad de cada cuadro y determinan la procedencia de cada pieza.

El valor de un cuadro

Tras una observación detallada del cuadro, determinan su estado actual y proporcionan una evaluación cuantificada. Esto permite al cliente comercializar la pieza a su precio óptimo y consolidarla en el inventario para su subasta a un precio que corresponde a las tendencias actuales del mercado.